Realmente el mundo vive horas inciertas pero de hecho históricas. Como decía mi amigo Ferran: “Quizás nos encontramos ante uno de los periodos más cruciales de la historia humana”. El asunto es que ahora tenemos la oportunidad de observar el capitalismo en su verdadera dimensión. ¿Cuándo podíamos haber imaginado que en EEUU 40.8 millones de personas estarían sobreviviendo a base de unos cupones alimenticios? ¿Cuándo podíamos haber oído que algunos Estados de Norteamérica tuvieran que apagar sus faroles para ahorrar algunos dólares? En fin: ¿Cuándo podíamos haber imaginado que Francia tuviera un 40 % de desocupación juvenil? (1). Ciertamente los datos son espeluznantes. Inimaginables en otras épocas. Pero son las muestras más claras de la grave depresión económica en que hoy está sumido el mundo.
Ahora mismo los EEUU continúan con sus graves provocaciones. Sus provocaciones son prácticamente al estilo nazi. A no dudarlo. En efecto las tensiones militares son muy flagrantes sobre todo en la península coreana. Sin embargo su desplazamiento económico-financiero en casi todas las regiones del planeta es cada vez más notorio. Para percibirlo no es necesario ser todavía un sabio o un enviado de Dios. Basta observar las oscilaciones lastimosas de las prensas occidentales que cada 15 o 20 días anuncian nuevos resurgimientos de una economía cada vez en mayor colapso y como si esto se solucionaría en unos cuantos meses. Pero de hecho estamos incursos en un reajuste geoestratégico muy importante. El poder mundial esta camino a oriente. Esa es una realidad inocultable. Y, es la causa real, a no dudarlo, de las actuales desesperaciones de occidente.
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http://www.diariouniversal.net/2010/09/07/reajuste-geoestrategico-mundial-prosigue-su-marcha/
http://www.aporrea.org/tiburon/a107482.html